..., debatiéndome entre mi mala conciencia por el examen al que no me había presentado aquella mañana de sábado y la parrillada de pescado frente a la playa que se extendía ante mis ojos, cuando me llegó la mala noticia: ha muerto mi madre.
De repente, sin avisar, sin enfermar, sin quejarse.
Sin darme tiempo a despedirme, a llamarla como tantos fines de semana y preguntarle cómo llevaba sus achaques (los normalitos para una mujer de 75 y fumadora) y la convivencia con mi hermana y su esquizofrenia, escuchar sus diatribas contra el gobierno y enfadarse con esta hija tan descerebrada que tiene... tenía.
Quizás no se sentía bien y no se atrevía a quejarse por que no nos pusiéramos pesados con que dejara de fumar.
Aquel día había salido con sus amigas, maestras y jubiladas como ella, a merendar en el café donde solían reunirse y planificar sus próximas escapadas y encuentros.
Cenó en casa con dos de mis hermanos y sus niños. Creo que hasta se abrieron una botella de cava que había sobrevivido a las navidades. Cuando se marcharon todos, se fue a acostar. Leyó un rato, mientras escuchaba la radio en su cuarto. Cuando ya las letras le bailaban ante los ojos, decidió echar un pulso al insomnio que la rondaba en los últimos tiempos cada vez que estaba en la cama (qué curioso, en su sillón, sentarse y empezar a roncar era todo uno, pero en la cama le costaba mucho conciliar el sueño. Yo le decía que era por escuchar la COPE en la mesilla de noche). Se durmió y ya no despertó.
La voy a echar mucho de menos.
Uno de los últimos diálogos por e-mail que sostuve con mi hermana a propósito de mamá
From: M
Sent: Monday, December 10, 2007 11:33 AM
To: MyLittleSister
Subject: qué le habrás contado a mi madre?!?
De repente, sin avisar, sin enfermar, sin quejarse.
Sin darme tiempo a despedirme, a llamarla como tantos fines de semana y preguntarle cómo llevaba sus achaques (los normalitos para una mujer de 75 y fumadora) y la convivencia con mi hermana y su esquizofrenia, escuchar sus diatribas contra el gobierno y enfadarse con esta hija tan descerebrada que tiene... tenía.
Quizás no se sentía bien y no se atrevía a quejarse por que no nos pusiéramos pesados con que dejara de fumar.
Aquel día había salido con sus amigas, maestras y jubiladas como ella, a merendar en el café donde solían reunirse y planificar sus próximas escapadas y encuentros.
Cenó en casa con dos de mis hermanos y sus niños. Creo que hasta se abrieron una botella de cava que había sobrevivido a las navidades. Cuando se marcharon todos, se fue a acostar. Leyó un rato, mientras escuchaba la radio en su cuarto. Cuando ya las letras le bailaban ante los ojos, decidió echar un pulso al insomnio que la rondaba en los últimos tiempos cada vez que estaba en la cama (qué curioso, en su sillón, sentarse y empezar a roncar era todo uno, pero en la cama le costaba mucho conciliar el sueño. Yo le decía que era por escuchar la COPE en la mesilla de noche). Se durmió y ya no despertó.
La voy a echar mucho de menos.
Uno de los últimos diálogos por e-mail que sostuve con mi hermana a propósito de mamá
From: M
Sent: Monday, December 10, 2007 11:33 AM
To: MyLittleSister
Subject: qué le habrás contado a mi madre?!?
Ayer por la noche la llamé, para decirle que ya estaba de vuelta en casa, y que llegaría el día 21 a Valencia y no veas la bronca que me soltó:
--ya me han dicho que vienes con tus amigos...
--sí. mamá, nos quedaremos en casa de Carmen
--¡vaya forma de pasar las navidades en familia!!...
--no, mamá, que se van todos a su casa el 23, como yo, para pasar la nochebuena
--¡ no sientas la cabeza ni con los años ni con los kilos!... a que no te has leído la encíclica del Papa?
-- no, mamá, me esperaré a que saquen la película.
From: MyLittleSister
Sent: lunes, 10 de diciembre de 2007 11:35
To: M
Subject: RE: qué le habrás contado a mi madre?!?
no fui yo, ayer hablé con ella y ya sabía lo del camping, y se pensaba que se iban a quedar en nochebuena. Ya le dije que no. No sé por qué, tenía un humor de perros, le dije que Max* se estaba yendo por la pata abajo todo el día y lo primero que se le ocurrió decirme es que la culpa era mía por darle comida congelada... (y ella nos ofrece el pavo de las navidades pasadas!!). Paciencia...
*Max es su hijo de 1 año, no el perro
In memoriam, a mi mejor compañera de viajes
Escrito por maroche el 29/01/2008 02:03
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